El pasado 8 de junio, tuvo lugar un rastrillo solidario en la entrada de la iglesia de San Gil, en Burgos. Esta iniciativa, impulsada por las Hijas de la Caridad en colaboración con voluntarios, tuvo como objetivo principal recaudar fondos para un proyecto de nutrición en Haití.

Un proyecto de esperanza para Haití

El destino de lo recaudado está íntegramente dedicado a un programa de nutrición para mujeres embarazadas, niños y jóvenes que son atendidos por las Hijas de la Caridad en este país caribeño. Se trata de una respuesta directa a la grave emergencia humanitaria que vive Haití, marcada por la inestabilidad social, la inseguridad alimentaria y la falta de acceso a servicios básicos de salud.

Un gesto solidario que une

Durante la jornada, tanto las hermanas como los voluntarios se unieron en un gesto de solidaridad y sensibilización, haciendo partícipes a los ciudadanos de Burgos de esta realidad. La presencia del rastrillo frente a la iglesia de San Gil no solo fue una oportunidad para colaborar económicamente, sino también para conocer de cerca la misión que desarrollan las Hijas de la Caridad en Haití y el impacto transformador de su labor.